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"A la maldad le gustan los niños, y a los niños les gusta la maldad”
¡Saludos sangrientos lectores!
“Aquí se respira el miedo”, frase del mítico conductor mexicano de radio, Juan Ramón Sáenz, era el slogan de su programa “La Mano Peluda”; el cual se le ocurrió al vivir una experiencia paranormal.
Dicha
frase llegaba constantemente a mi mente al disfrutar “Cuando acecha la Maldad”; la
que considero como la Mejor Película de Terror del 2023. Y vaya que tuvo
buena competencia como “Evil Dead Rise”, “Talk To Me”, entre otras. Es más, cuéntenme, ¿cuál fue su película
de terror favorita de del año que recién terminó?.
Este es el quinto largometraje dirigido por el cineasta argentino Demián Rugna (quien también lo escribió). Se estrenó en el Festival Internacional de Toronto, ganó el prestigioso premio a mejor película en Sitges por primera vez para una película latina (en 60 años del festival), lo cual es un gran logro, y esperemos que más películas latinas del género logren lo mismo en un futuro no muy lejano.
Él es un especialista en Cine de Terror. De su filmografía sobresale “Aterrados” (2017), que es una historia paranormal que deriva en una investigación policiaca, forense, y sobrenatural. Tiene gore, momentos como indica su título, referencias a clásicos del género, y a pesar del poco presupuesto y una historia sencilla, logra sacarles provecho a todos sus recursos de manera loable. Recomendada ampliamente.
De hecho, “Aterrados” lo
ayudó a asociarse con distribuidores y sacar $ para hacer una película más grande.
¿DE QUÉ TRATA?
En un pequeño pueblito rural de Argentina, conocemos a un hombre que está poseído por un demonio. Después de echar mano del folklore del lugar y creencias del catolicismo, los pobladores, encabezados por Pedro (nuestro prota), deciden que lo mejor es deshacerse del sujeto, quien ya no tiene salvación.
Esta situación desencadena una serie de eventos terroríficos como posesión demoniaca y muerte, que poco a poco se expanden en los alrededores y en la Ciudad.
¿Estamos ante un apocalipsis demoniaco?. No importa, disfrutémoslo.
COMENTARIOS
Aquí lo verdaderamente importante: Debemos considerar las "7 reglas para tratar con poseídos" que aprendemos en la película, ya que nunca se sabe cuándo las podríamos emplear...
1. No usar luz eléctrica; las sombras que proyectan, los atraen.
2. No estar cerca de animales.
3. No llevar algo que estuvo cerca del encarnado.
4. No lastimar al encarnado.
5. No usar armas de fuego contra el encarnado, (es matarte a ti mismo).
6. Nunca nombrar a la maldad por su nombre, porque es como invocarla.
7. No temer a la muerte. "Si tienes miedo de caer en un pozo, la maldad pondrá un pozo debajo tuyo".
Bueno, les sugiero imprimir y pegar en su refrigerador estas reglas. :)
Ver esta película es un CAOS total, es algo como experimentar una aventura increíble repleta de horror, oscuridad, y que toca temas como la importancia de mantener unión familiar, folklore, religión, y demonios personales (eso no fue intencional). Incluso incluye una sub-trama relacionada al autismo y cómo estas entidades malvadas al entrar en el cuerpo de un autista, se ven imposibilitados en descifrar su mente, y, por lo tanto, se pueden perder en una especie de limbo por mucho tiempo. Ya después podrá descifrarlo y “poseerlo”.
Esas situaciones se envuelven en misterio, suspenso, y por momentos incluso hasta se siente un “Survival Horror” tipo “Resident Evil” o “The Evil Within”.
La ruta de escape de Pedro es como dice Marylin Manson:“La larga huida del infierno”.
Tenemos muchas escenas memorables y espeluznantes (UNA escena que involucra a un perro se va a quedar en tu mente por toda tu vida, o cuando aparece un primo del “Black Phillip” de “The Witch”), además de buen gore, body-horror, efectos especiales estupendos, y referencias a clásicos del género como. Aunque también tenemos referencias al Cinema Zombie más brutal, como cuando los posesos comen cerebros. Genial.
Las reglas que la historia instaura se respetan, y tienen sentido.
En cada minuto se puede sentir tensión, incluso en los momentos emotivos.
También hay espacio para momentos dramáticos, principalmente relacionados a la familia del prota, quien demuestra vulnerabilidad y se quiebra en una situación específica. Sus propios demonios lo orillan a equivocarse, lo cual le da más dimensiones a su historia.
Rugna comenta que la inspiración de la película se dio cuando vio noticias en pueblos argentinos de gente que vive en el campo, y situaciones como cuando la gente se enferma, familias pobres con un drama parecido, así que él transformó todo eso en una peli de terror, con un encarnado en pampas argentinas.
Se escapa de los temas de poseído convencionales (o sea como exorcismos y otras situaciones propias del sub-género de posesión demoniaca), y hace todo más body-horror, no tan psicológico, aunque sí hay algo de eso.
El guion lo hizo en 3
meses, y en una semana tenía 60 páginas. Y se nota esa pasión, plasmada en celuloide.
Se usaron muchos exteriores, por varias regiones como lomas de Zamora, y hacían base en capital, San Andrés de Giles.
Su estilo detrás de cámaras es vertiginoso, pero también se toma el tiempo para contar su historia.
Todo eso es mérito de los actores Ezequiel Rodríguez, Demián Salomón, y Silvina Sabater; principalmente. La química entre hermanos es estupenda, y en general cuando convive la familia, te preocupes genuinamente por ellos y quieres que les vaya bien.
La noche se vuelve un antagonista, gracias a la estupenda atmósfera y fotografía de Mariano Suárez, quien también tiene su recorrido por el género. Aprovecho también para resaltar la estupenda música creada por Pablo Fuu, ya que va en tono con lo macabro de la historia.
Los efectos especiales de Marcos Berta, Román Kampelmacher, y Constanza Pugliese, y todo el equipo de efectos visuales; son absolutamente de alarido. Te hacen sentir repulsión y miedo, al mismo tiempo. No sé, creo que “Brain Dead” y cosas de Frank Henenlotter provocan algo ligeramente parecido.
En sí, el montaje es digno de resaltar.
El final es alucinante, y a pesar de que no les daré ni un detalle; puedo comentarles que es espeluznante y muy bonito al mismo tiempo. Es una sensación difícil de olvidar.
El cine argentino está en un momento de esplendor, incluso creo que “Argentina 1985” tuvo que ganar mejor película internacional en los Óscares de hace un año, pero ok.
Espero que en México se pueda realizar algo similar, y volver a la época dorada que vivió el género en los 60’s y 70’s. Recientemente, tenemos “Huesera”, “Mal de Ojo”, y algunos episodios del remake de “La Hora Marcada”.
Ojalá que “Cuando acecha la maldad” logre poseer al Cine de Terror en América Latina, para que siga su ejemplo. Deseo que reviente la taquilla para que así, Rugna y cineastas interesados en el género, tengan más posibilidades para desarrollar su talento.
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