"Aquí se respira el miedo".
Saludos tenebrosos lectores. Con singular tristeza les informo (aunque muchos ya saben) que ayer murió Juan Ramón Sáenz, un peculiar personaje dentro de los medios de comunicación mexicanos. ¿Porqué peculiar? El sujeto era experto en la palabra terror. Sabía bastante sobre eventos sobrenaturales, literatura, Cine, historia y demás relacionadas con lo que implica Terror.
Lamentablemente el cáncer lo venció a pesar de que ni siquiera entes demoniacos, fantasmas, ni otras manifestaciones paranormales pudieron contra él.
Su trabajo más reconocido data de 15 años atrás cuando llegó a la conducción del programa de radio (AM) "La Mano Peluda", emisión que iniciaba a las 22:00 horas y terminaba a la media noche en el cual distintos radioescuchas hablaban para contar situaciones propias relacionadas con fantasmas, demonios, y demás.
Juan Ramón además de escuchar tales relatos, realizaba aportaciones bastante interesantes y en su caso explicaba (al menos lo intentaba) lo que los atemorizados participantes contaban.
Jamás olvidaré el espeluznante relato de Josué, un pocho que vendió su alma a entes diabólicos a cambio de fortuna y fama. Si bien el relato tiene algunas similitudes con Películas de Terror como "Evil Dead", es totalmente aterrador.
Tampoco la situación de Neftalí, un chico que logró escapar de una secta satánica pero que posteriormente fue cazado por la misma. Su madre fue asesinada por los mismos.
Incluso en un programa una chica de nombre Katia, supuestamente poseída por un demonio llamado Astaroth, sufrió la posesión en vivo e incluso dicho personaje maligno amenazó a nuestro conductor.
Estas historias en particular (y algunas otras) fascinaron mi necesidad de Terror durante el principio de este nuevo milenio.
Por ello, agradezco a J.R. (como alguna vez lo apodó un radio escucha) donde quiera que esté por noches aterradoras en las cuales uno podía vivir con miedo los relatos, historias, e investigaciones derivadas del programa.
No olvido manejar en carretera y tener en el "fondo" el programa de J.R. Tampoco olvidaré que junto a algunos miembros de mi familia nos sentábamos para cenar y escucharlo.
Después intentó capitalizar su éxito con un programa de t.v. en el cual se dramatizaba sobre eventos paranormales. Nunca fue de mi gusto dicho show ya que a mi consideración carecía de credibilidad y valores de producción decentes. Sin embargo el formato del mismo me pareció más que interesante porque se realizaba desde el punto de vista periodístico.
Sus libros tampoco fueron grandiosos ya que eran recopilaciones de mitos clásicos o algunos un tanto exagerados. Cierto, merece crédito por intentarlo.
No obstante, jamás manchará la imagen de J.R. Quien es un héroe dentro del género del Terror mexicano. Él dedicaba su talento en algo que no muchos aprecian en mi país: el gusto por el miedo.
Sé que J.R. estará presente cada vez que alguien repita la frase que él mismo inmortalizó (después de un encuentro con un ente maligno, derivado del relato de Josue), "AQUÍ SE RESPIRA EL MIEDO".
Saludos tenebrosos lectores. Con singular tristeza les informo (aunque muchos ya saben) que ayer murió Juan Ramón Sáenz, un peculiar personaje dentro de los medios de comunicación mexicanos. ¿Porqué peculiar? El sujeto era experto en la palabra terror. Sabía bastante sobre eventos sobrenaturales, literatura, Cine, historia y demás relacionadas con lo que implica Terror.
Lamentablemente el cáncer lo venció a pesar de que ni siquiera entes demoniacos, fantasmas, ni otras manifestaciones paranormales pudieron contra él.
Su trabajo más reconocido data de 15 años atrás cuando llegó a la conducción del programa de radio (AM) "La Mano Peluda", emisión que iniciaba a las 22:00 horas y terminaba a la media noche en el cual distintos radioescuchas hablaban para contar situaciones propias relacionadas con fantasmas, demonios, y demás.
Juan Ramón además de escuchar tales relatos, realizaba aportaciones bastante interesantes y en su caso explicaba (al menos lo intentaba) lo que los atemorizados participantes contaban.
Jamás olvidaré el espeluznante relato de Josué, un pocho que vendió su alma a entes diabólicos a cambio de fortuna y fama. Si bien el relato tiene algunas similitudes con Películas de Terror como "Evil Dead", es totalmente aterrador.
Tampoco la situación de Neftalí, un chico que logró escapar de una secta satánica pero que posteriormente fue cazado por la misma. Su madre fue asesinada por los mismos.
Incluso en un programa una chica de nombre Katia, supuestamente poseída por un demonio llamado Astaroth, sufrió la posesión en vivo e incluso dicho personaje maligno amenazó a nuestro conductor.
Estas historias en particular (y algunas otras) fascinaron mi necesidad de Terror durante el principio de este nuevo milenio.
Por ello, agradezco a J.R. (como alguna vez lo apodó un radio escucha) donde quiera que esté por noches aterradoras en las cuales uno podía vivir con miedo los relatos, historias, e investigaciones derivadas del programa.
No olvido manejar en carretera y tener en el "fondo" el programa de J.R. Tampoco olvidaré que junto a algunos miembros de mi familia nos sentábamos para cenar y escucharlo.
Después intentó capitalizar su éxito con un programa de t.v. en el cual se dramatizaba sobre eventos paranormales. Nunca fue de mi gusto dicho show ya que a mi consideración carecía de credibilidad y valores de producción decentes. Sin embargo el formato del mismo me pareció más que interesante porque se realizaba desde el punto de vista periodístico.
Sus libros tampoco fueron grandiosos ya que eran recopilaciones de mitos clásicos o algunos un tanto exagerados. Cierto, merece crédito por intentarlo.
No obstante, jamás manchará la imagen de J.R. Quien es un héroe dentro del género del Terror mexicano. Él dedicaba su talento en algo que no muchos aprecian en mi país: el gusto por el miedo.
Sé que J.R. estará presente cada vez que alguien repita la frase que él mismo inmortalizó (después de un encuentro con un ente maligno, derivado del relato de Josue), "AQUÍ SE RESPIRA EL MIEDO".