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domingo, 6 de noviembre de 2011

I Know What You Did Last Summer (Sé Lo Que Hiciste el Verano Pasado) (1997) - ¡Claro que lo sabes! ¡Se nota que has visto slashers de los 80's!.

 Claro ejemplo del sub-género slasher en los 90's.
5/10

¡Saludos sangrientos lectores!
Había evitado por estos casi 5 años hacer este review... La razón exacta no la sé. Tal vez porque es un título que se puede considerar como la resaca de "Scream" (1996) o porque es un slasher noventero con "estrellitas" de t.v., y llena de clichés sacados de series como "Dawson's Creek" o cosas así.

Lo que no puedo negar es su popularidad y base de fanáticos y que seguramente uno de los slashers más populares a nivel taquilla en los últimos años. Definitivamente no vive a las expectativas, y sobre todo, le COPIÓ EL CONCEPTO a "Prom Night" (1980). Si, COPIÓ vulgarmente. 

T R A M A
Ahí vamos... 4 amigos de la prepa se acaban de graduar y están celebrando el 4 de julio. Todos tienen planes a futuro como buenos chicos estadunidenses: Julie (la más candente) planea estudiar en Harvard (ajá, con esos hermosos y grandes senos te tomarán en serio académicamente), Helen irá a Nueva York para ser actriz (como cualquier putita que intentará acostarse con algún productor de B-Movies), Ray se quedará en el pueblo para ayudar al negocio de la pesca familiar, y Barry consiguió una beca de lucha libre. Y dicen que el white trash no existe para quienes estudian prepa...

En fin... Ellos están en una fiesta muy grande y al salir, mientras van en un oche, atropellan por accidente a un hombre. Se freakean bastante por lo que puede suceder ya que están bajo la influencia de alcohol así que tiran el cadaver en el río esperando que desaparezca.
Pero un año después, cuando los amigos se reúnen durante sus vacaciones de verano; reciben letras de amenaza en las cuales "alguien" dice saber lo que hicieron. Barry es atropellado por un coche, el cabello de Helen es "mochado" a propósito, alguien coloca cadáveres en la cajuela del coche de Julie, así que deben investigar quién es el misterioso sujeto que se viste de pescador y que ansía destazarlos con su gancho. Oh, parece que alguien quiere reducir la población de adolescentes.

C O M E N T A R I O S
Este no es más que otro slasher de los 90's en el cual tenemos adolescentes bonitos que son asesinados uno a uno por un psicópata que se cree que estaba muerto. ¿Han notado alguna diferencia con cualquier historia de algún slasher de los 80's?. No mencionaré "Prom Night" porque es muy obvio pero tampoco voy a negar que se inspira tal vez demasiado con otos títulos similares. 

Es más, si han visto "Viernes 13 parte V" (1985), se acordarán mucho de la trama de esta Película y así entenderán en gran parte el final. Ya les dije todo con esas referencias. 

Creo que no hay mucho qué comentar sobre "Sé lo que hiciste..." pero se pueden destacar los siguientes aspectos: Jennifer Love Hewitt es la mejor cosa sobre esto. Ella está super-increíblemente "Hot" y demuestra que tomó algunas clases de actuación. Es demasiado linda como para ser perseguida por un asesino. Sus senos merecen un monumento y sus anginas un respeto especial. 
Sarah Michelle Gellar se ve un tanto regordeta pero absolutamente linda. Simplemente se para y luce bonita y se luce en la escena donde es perseguida... SÍ, EL HOMENAJE A "Prom Night". Un poco de creatividad no hubiera lastimado Sr. Williamson. 

Creo que tenemos escenas interesantes y el suspenso es decente rumbo al desenlace, pero no lo suficiente para que se considere como una Película de Terror sólida. La premisa no me parece mala pero ya hemos visto estas historias muchas veces. Es fácil descubrir la identidad del asesino y sus motivos.

Las escenas de asesinato sugieren más violencia que nunca llega y terminan siendo muy light. Por este motivo, no se puede considerar como un slasher que valga la pena. No sé si estos chavos tengan en la cláusulas en sus contratos anti-sangre y anti-desnudos, lo cual sería lamentable. 
La Cinematografía y valores de producción en general son muy buenos. Se ve ávido, se siente dinámico, y detalles como la lluvia y oscuridad encajan bien con la atmósfera. No hay quejas en ese aspecto.

En sí no es una MALA Película, pero sigue siendo del montón. Un slasher predecible sin mucho que aportar... Ahora, si tú naciste en los 90's probablemente lo disfrutes ya que contiene mucho de la cultura pop de la época.

Las escenas que lo inmortalizan (y de las cuales se ha hecho burla en films como "Scary Movie" de 2001) son cuando Jennifer Love Hewitt grita algo como "¿qué quieres de mi?" mientras gira y la toma se vuelve aérea. Muy chistosa. Y bueno, la aparición del asesino en la lluvia. El asesinato de la Prom Queen también es algo memorable dentro del Terror noventero, aunque valga la reduncancia, ya lo vimos antes.

El Director y guionista, el Sr. Kevin Williamson le debe mucho al sub-género slasher de los 80's aunque lamentablemente éste título es y será más famoso que algunas joyas de dicha época. ¿Dónde está la justicia sangrienta?. 

2 comentarios:

Carlos Paredes dijo...

Horror lésbico. Y no lo digo por la presencia de Anne Heche en el cast. Sino porque es el tipo de película de terror que le encanta a las mujeres no habituales consumidoras de películas de terror. Estamos frente a la que es nada menos que la respuesta más elaborada, sistemática e inmediata al fenómeno Scream (1996). Ambas películas cuentan con guión de Kevin Williamson, sólo que esta vez, Williamson adapta una novela de Lois Duncan. El film tiene cosas que molestan mucho y te hacen desconcentrarte del buen armado general que ofrece el pack entero. Por ejemplo: a) molesta en exceso que los automóviles siempre estén abiertos y con las llaves puestas: Saltas como Pedro Picapiedra a su interior y hechas a andar el motor. b) Otro momento muy estúpido es cuando Julie (Jennifer L.H.) quien ya se ha acercado a la identidad del asesino llega al recinto dónde se está realizando el concurso de belleza y “tiene” que caminar hasta el medio del salón para darse cuenta de que el lugar ya está vacío. c) Que el asesino ingrese subrepticiamente a la casa de Helen (Sarah M.G.) y permanezca oculto en el closet quien sabe cuántas horas hasta poder abandonar el lugar sin ser visto es algo absurdo. d) Que las mujeres griten en el momento menos oportuno para las víctimas que son atacadas por el asesino que aprovecha precisamente la distracción provocada por el grito de la fémina de turno. e) Además, muy poco creíble que a plena luz del día en medio de un barrio residencial, el asesino haya desocupado el maletero del auto de Julie llevándose el cadáver lleno de cangrejos. F) Y lo que te saca risas de sorna, es que Ray (Freddie P. Jr.) luego de nadar sujeto de las redes del barco del asesino sube completamente seco a la embarcación. Digamos que la película recuerda mucho por momentos a un clásico menor del terror gótico. Un cinéfilo se percata de inmediato en las enormes similitudes formales y “argumentales”: el largo travelling de los créditos iniciales es prácticamente igual al de Dracula (1979) protagonizada por Frank Langella. La cámara avanza mostrándonos un amenazante y tenebroso páramo costero justo al atardecer. Como si fuera poco, el desenlace ocurre en ambas películas al interior de un barco navegando alejándose de la costa. Y para rematar todo, el “final” del vampiro es muy semejante al “final” del asesino elevándose involuntariamente hacia lo más alto del mástil para terminar abandonando misteriosamente la embarcación “descorporizándose”. CONTINÚO:

Carlos Paredes dijo...

… SIGO: Pero bueno… errores y copias al margen… me parece que es un hecho innegable que estamos ante una película bastante decente. Minimalista y con algunos buenos momentos. Hay notables travelling ejecutando interesantes planos secuencias. Las muertes no son tan blandas ni asépticas para ser un producto mainstream protagonizado por estrellas televisivas al igual que Scream. Y si bien los guionistas y directores de cine de terror han tratado como estúpidos a su audiencia a lo largo de la historia, en esta ocasión el director recurre a otro tipo de estupidez: Te deja todo claro para que no te pierdas. Así, tenemos planos que te muestran a un personaje (Max interpretado por la futura estrella de The Big Bang Theory, Johnny Galecki) dejando un gancho sobre un bloque de hielo y acto seguido un primer plano te “explica” que el gancho ya no está donde lo dejó la inminente víctima. La película se hace algo predecible, precisamente porque juega sin hacer trampa. Y tiene su gracia dentro del juego de descubrir al asesino. Suponemos que por contar con base literaria se pudo recurrir a una “treta” un poco más elaborada con falsos culpables anónimos como “El padre de…”; “el hermano de…”; “la hermana de…”; “Un tal Billy Blue” a los que se suman algunos improbables nombres propios de personajes que pululan en la trama como “Max” y el más protagónico “Ray”. La escena graciosa del grito de Julie preguntándole al invisible asesino que qué es lo que quiere, es un claro quiebre dramático forzado, pero hoy resulta una escena graciosa gracias a Scary Movie (2000) y no porque sea una escena chistosa per se. Y Jennifer Love Hewitt: Wow… Hermosa, sensual, carismática, incombustible, sencillamente irresistible, y eso que su belleza en esta película palidece con lo buena que se puso con el tiempo. Al filmar la película tenía 18 añitos solamente. Todavía no era una mujer hecha y derecha. Está mucho más sexy en la deshilachada y aburrida secuela. Jennifer L.H. pudo ser la scream queen del siglo, pero obviamente estaba para mayores retos… televisivos. No es una gran película de terror, pero tiene sus méritos; así, guste o no, por números, factura técnica, e incluso por relevancia mediática, estamos ante una de las películas de terror más importantes de la década de los 90. Y Benjamin Willis, el Fisher Man, tenía buen material para convertirse en un nuevo ícono del terror. Notable que la trama se hace cargo de la clásica leyenda urbana del hombre del garfio en varias de sus variantes, que en realidad son distintas leyendas urbanas y que aparecerían más tarde precisamente en la saga Urban Legend. Recomendable, sobre todo como ejercicio de “neo-arqueología fílmica”.