"...Tenemos conocimiento del orden, la constancia y la perpetua renovación del mundo material que nos rodea. A pesar de que cada una de sus partes es frágil y transitoria, y que son inquietos y migratorios sus elementos, sin embargo, perdura. Está sometido a una ley de permanencia, y aunque muere una y otra vez, siempre vuelve a la vida. La disolución no hace más que dar nacimiento a nuevos modos de organización, y una muerte es la madre de mil vidas. Por lo tanto, cada hora es sólo un testimonio de cuán efímera y, sin embargo, segura y cierta es la gran totalidad. Es como una imagen en el agua, que siempre es la misma, aunque el agua fluya constantemente. El sol se esconde para levantarse de nuevo, el día es engullido por la oscuridad de la noche, para nacer de ella, tan puro como si nunca se hubiera apagado. La primavera se convierte en verano y, a través del verano y el otoño, en invierno, para retornar, con mayor seguridad, a triunfar sobre esa tumba hacia la cual se ha acercado rápidamente desde su primera hora. Nosotros lloramos los capullos de mayo porque se van a marchitar, pero sabemos que mayo es un día que se vengará de noviembre, por la rotación de ese solemne círculo que nunca se detiene, el cual nos enseña, en la cúspide de nuestra esperanza, que hemos de ser siempre equilibrados y que, en la profundidad de la desolación, no debemos desesperarnos nunca."
WILLIAM PETER BLATTY - "EL EXORCISTA" (1971).
Saludos sangrientos lectores. En ésta ocasión voy a tratar un tema triste pero con un enfoque positivo que tiene como finalidad homenajear a alguien quien en vida aportó cosas inconmensurables tanto al Cine de Terror como a la literatura del mismo género. Hace una semana hice una reseña sobre las series de t.v. "El Exorcista"; y resalté que el hombre motivo de éste homenaje dio su bendición para crear nuevas historias basadas en su best-seller, lo cual me deja un sabor agridulce porque por una parte me siento contento al mencionarlo por última vez de manera satisfactoria, pero también siento un aura de tristeza y tragedia por escribir tan pronto nuevamente sobre él. Es una especie de adiós bañado en melancolía.
William Peter Blatty se ha ido de éste mundo terrenal para reunirse con los Padres Merrin y Karras, el Coronel Kane, entre otros; pero sobre todo para dejar un grandioso legado que nos acompañará cada vez que cuestionemos la existencia del bien y del mal, así como el misterio que acompaña el origen del bien, o en su caso, el análisis de aquel pecado original por el cual la maldad castiga al ser humano.
Blatty, en su faceta de escritor creó una mitología insuperable en diferentes trabajos, aunque me enfocaré en aquellos que tienen que ver directamente con el Cine de Terror, independientemente de que reconozco su capacidad en el género de la Comedia Negra y Thrillers. El estilo literario del autor americano es exquisito por su elevado acervo lingüístico, referencias culturales y religiosas ("no permitas que el dragón sea mi guía"), pero sobre todo, por ser capaz de transmitir diferentes emociones que van desde la ternura, pasado por la desesperación, haciendo escala en la esperanza y la fe, y concluyendo con el horror más siniestro, antes de llegar a la redención, tal y como aprendemos en "El Exorcista" y en "Legión". No conozco otro escritor que trace de manera tan descriptiva a sus personajes, a quienes les imprime un cariño especial además de un pasado siempre enfocado en el misticismo. Sin problema se podrían escribir "spin-offs" inspirados en sus personajes, algo que sucede en "La Novena Configuración", y aunque el personaje del astronauta no es un protagonista, tiene un pasado marcado por el mal, tal y como aprendemos en "El Exorcista". En diferentes ocasiones, desde la comodidad de un sillón, aparto el libro después de leer una frase (como la del inicio de la entrada) de Blatty y pienso tal y como lo hizo Chris MacNeil: "Esto es muy elevado para mi". Me asombra la manera en que el Señor puede enlazar poesía con dramatismo y horror. Esto mis amigos, debe ser una inspiración para escritores que inician su carrera.
William Peter Blatty se ha ido de éste mundo terrenal para reunirse con los Padres Merrin y Karras, el Coronel Kane, entre otros; pero sobre todo para dejar un grandioso legado que nos acompañará cada vez que cuestionemos la existencia del bien y del mal, así como el misterio que acompaña el origen del bien, o en su caso, el análisis de aquel pecado original por el cual la maldad castiga al ser humano.
Blatty, en su faceta de escritor creó una mitología insuperable en diferentes trabajos, aunque me enfocaré en aquellos que tienen que ver directamente con el Cine de Terror, independientemente de que reconozco su capacidad en el género de la Comedia Negra y Thrillers. El estilo literario del autor americano es exquisito por su elevado acervo lingüístico, referencias culturales y religiosas ("no permitas que el dragón sea mi guía"), pero sobre todo, por ser capaz de transmitir diferentes emociones que van desde la ternura, pasado por la desesperación, haciendo escala en la esperanza y la fe, y concluyendo con el horror más siniestro, antes de llegar a la redención, tal y como aprendemos en "El Exorcista" y en "Legión". No conozco otro escritor que trace de manera tan descriptiva a sus personajes, a quienes les imprime un cariño especial además de un pasado siempre enfocado en el misticismo. Sin problema se podrían escribir "spin-offs" inspirados en sus personajes, algo que sucede en "La Novena Configuración", y aunque el personaje del astronauta no es un protagonista, tiene un pasado marcado por el mal, tal y como aprendemos en "El Exorcista". En diferentes ocasiones, desde la comodidad de un sillón, aparto el libro después de leer una frase (como la del inicio de la entrada) de Blatty y pienso tal y como lo hizo Chris MacNeil: "Esto es muy elevado para mi". Me asombra la manera en que el Señor puede enlazar poesía con dramatismo y horror. Esto mis amigos, debe ser una inspiración para escritores que inician su carrera.
La Filmografía de Blatty es en sí una Trilogía: "La Novena Configuración" (1980), "Exorcista III" (1990), y "Exorcista III: Legión" (2016); aunque ésta última es por así decirlo, un "Director's Cut" que se creía perdido y olvidado. En lo personal, mi corazón en cuanto al género está cubierto en gran parte por la mitología creada por Blatty desde la novela de "El Exorcista"; al grado que he leído el libro (un regalo por parte de una ex) al menos cinco veces y cada vez se torna más espiritual y escalofriante. "Legión" ocupa un lugar muy importante porque da continuidad a "Exorcista" de una manera más pausada pero igual de impactante gracias a diálogos magníficos, especialmente cuando Kinderman y "El Paciente X" debaten sobre el castigo infernal sobre la fe cristiana, además de un asunto de venganza personal entre el demonio Pazuzu, su "jefe", y los exorcistas de la novela original. "La Novena Configuración" es un estupendo Thriller Paranormal plagado de acción y críticas a la política castrense de aquel tiempo en los Estados Unidos, aunque mantiene su relación con "El Exorcista" mediante el astronauta que es "amenazado" por Regan.
Sinceramente, "El Exorcista" es mi binomio favorito "novela-película" debido a que se complementan perfectamente: Ambos materiales son escalofriantes, tienen diálogos memorables, personajes con un desarrollo que se traduce en afecto, así como análisis introspectivo de nuestros miedos más profundos y cuestionamiento sobre nuestra fe en cuanto a Dios y el diablo; entre muchas otras cosas. Cuando leo la novela, de inmediato me surge la necesidad de ver la película y comparar los aspectos más relevantes entre ambos porque me genera una satisfacción muy grande pero indescriptible, y en ciertos casos me provoca una emoción imposible de explicar. Blatty en conjunto con Friedkin formaron una mancuerna milagrosa que dio como resultado la Mejor Película de Terror de todos los tiempos, y esto gracias a la visión de Blatty, quien desde el primer instante supo que su novela podía ser una especie de Biblia para el género. Por ejemplo, en la novela se menciona el hecho de que Karras siente "unas manos frías que aprietan su cuello", lo cual me hace pensar en la imagen espectral de Capitán Howdy, quien aparece entre flashazos de la película. O la descripción santificada del Padre Merrin, quien es magistralmente representado por Max Von Sydow. ¿Y qué decir del rencor que Pazuzu tiene contra el veterano exorcista?. Ésa relación de odio y respeto mezclado con envidia unilateral por parte de un ente que pertenece a otra dimensión respecto a un ser humano me parece monstruosamente interesante y emotiva.
En conjunto, es material absolutamente interesante a nivel narrativa y plasmado al celuloide con extrema devoción. Cuando un libro y una película aportan tanto a tu vida cotidiana, tus creencias, y tu fe, significa que un ser humano ha sido capaz de cambiar tu vida, y eso es precisamente lo que hizo William Peter Blatty: Cambió la manera de hacer literatura y cine de género (terror) para siempre. Ha marcado generaciones desde hace más de cuatro décadas y ahora su legado seguirá vivo gracias a nuestros hijos, nietos, astronautas, curas, etc.
En algún momento haré un análisis comparativo entre éstas novelas y películas, debido a que hay mucho material para disfrutar y generar todo tipo de teorías. Mientras tanto, solo me queda recomendar el material del Señor Blatty para quienes no lo conocen, ya que quienes lo han disfrutado durante todos estos años, sabrán que siempre es buen momento para recordarlo y para que continúe aportando algo en nuestra vida.
"Billy" no se ha ido. Constantemente lo recordaremos cuando vivamos en carne propia las experiencias que transmitía a través de sus libros y novelas, además de que vitorearemos sus proezas como la de generar revuelo en El Vaticano, en la sociedad americana conservadora, y por cambiar por siempre el Cine de Terror. A pesar de que todo el material anteriormente señalado está muy cerca y presente en mi vida, siempre me quedará el dolor de no poderle preguntar cómo llegó a él la inspiración para crear la historia de "El Exorcista"; también el conocer cómo inventó a Demian Karras, el personaje literario con quien más me identifico, pero sobre todo, siempre tendré el misterio sin resolver de la idea de generar encuentros meta-físicos y terrenales con entes demoniacos ancestrales. ¿Cual fue su inspiración para añadir elementos medievales de la religión en el Washington de los años 70's?. Me interesa saber todo acerca de sus motivos, su idiosincrasia, las veces que dudo de la fe, aquellos pasajes en vez de premoniciones que lo invadían para crear historias fenomenales, pero sobre todo, su devoción que cambió un género para siempre sin planearlo. No queda más que decirle gracias y honrar su memoria cada que su material nos genere algo en nuestro interior.
"En lo que respecta a Dios, soy un no-creyente. Todavía lo soy. Pero cuando se trata del demonio, bueno, eso es algo diferente".
"Billy" no se ha ido. Constantemente lo recordaremos cuando vivamos en carne propia las experiencias que transmitía a través de sus libros y novelas, además de que vitorearemos sus proezas como la de generar revuelo en El Vaticano, en la sociedad americana conservadora, y por cambiar por siempre el Cine de Terror. A pesar de que todo el material anteriormente señalado está muy cerca y presente en mi vida, siempre me quedará el dolor de no poderle preguntar cómo llegó a él la inspiración para crear la historia de "El Exorcista"; también el conocer cómo inventó a Demian Karras, el personaje literario con quien más me identifico, pero sobre todo, siempre tendré el misterio sin resolver de la idea de generar encuentros meta-físicos y terrenales con entes demoniacos ancestrales. ¿Cual fue su inspiración para añadir elementos medievales de la religión en el Washington de los años 70's?. Me interesa saber todo acerca de sus motivos, su idiosincrasia, las veces que dudo de la fe, aquellos pasajes en vez de premoniciones que lo invadían para crear historias fenomenales, pero sobre todo, su devoción que cambió un género para siempre sin planearlo. No queda más que decirle gracias y honrar su memoria cada que su material nos genere algo en nuestro interior.
"En lo que respecta a Dios, soy un no-creyente. Todavía lo soy. Pero cuando se trata del demonio, bueno, eso es algo diferente".
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